La gastronomía en España es uno de los valores más importantes de nuestra cultura. Por este motivo surgió el concepto de Slowbar que cultivamos en La Bernarda, nuestro gastrobar en Sevilla, una manera de defender los atractivos culinarios propios.
Aunque no existe consenso sobre el nacimiento del concepto que da cobijo a los Slowbar, el llamado movimiento Slow Food surgió en la segunda mitad de los años 80 en Italia como una reacción a la excesiva expansión de la llamada ‘fast food’, la cual suponía una profunda amenaza a la cultura gastronómica transalpina.
Este movimiento, rápidamente extendido por más de 150 países, está plenamente asentado en España. Por tanto, te mostramos cuáles son las ventajas de sentarte en uno de los establecimientos adheridos a esta filosofía.
1. Te sentirás siempre en casa
Esta corriente pretende salvaguardar los valores tradicionales de la cultura del país, dentro de los cuales la gastronomía desempeña un papel fundamental. Por ello, visitando aquellos lugares que adopten esta forma de 
entender el mundo, te sentirás unido a la tierra en la que te encuentres, pues utilizarán como materia prima productos originarios de la misma con la reinterpretación de la propia casa.
Hablamos de lugares, que aun empleando técnicas propias de la nueva cocina, conservan un profundo respeto por la tradición y lo notarás en cada uno de sus platos y recetas.
2. Protegerás la cultura gastronómica
Una de las claves para comprender esta corriente es la asunción de la gastronomía como factor clave de la cultura, considerándola como patrimonio de la humanidad, de tal modo que comer en un gastrobar en Sevilla con esta filosofía, es un modo excelente de defender la cultura propia.
La pasión por la comida y su degustación es parte de nuestra forma de ser en España, por lo que con el mero hecho de sentarte en una mesa a disfrutar pausadamente de los alimentos es una forma maravillosa de apoyar la conservación de la cultura.
3. Aumentarás tu calidad de vida
El Slow Food es un concepto que actúa como fuente de salud de los consumidores por distintos motivos. En primer lugar, porque todos los endocrinos aseguran que la degustación pausada de los alimentos contribuye al adelgazamiento, pues en caso contrario se genera una mayor capacidad gástrica de la que el organismo tiene, llegando a comer en exceso.
En segundo lugar, porque uno de los valores fundamentales que definen a este movimiento es el respeto continuo por los ritmos naturales de la vida, siendo el acto de alimentarse una parte importante de la ecuación a la que ineludiblemente hay que guardar un lugar rebosante de calma, para que la nutrición se produzca en unas condiciones adecuadas.
Estos establecimientos generan el entorno y el ambiente perfecto para llevar a cabo el placer de la comida, convirtiendo a tu paladar en el protagonista y dando al tiempo durante el cual se desarrolla el acto un valor muy secundario.
Ahora que ya conoces las ventajas de un Slowbar, el siguiente paso es venir a conocer las ventajas de algunos de sus establecimientos, tales como La Bernarda, un gastrobar en Sevilla diferente y donde regalamos una experiencia completa para el paladar. ¡La mejor opción para comer en Sevilla!
